Corrida Concurso a medias

Corrida concurso a medias. Varios toros apuntaron alto durante la lidia pero ninguno llegó a romper.

Tarde de expectación en La Misericordia. Un cartel con interés para la corrida concurso de ganaderías compuesto por seis hierros de prestigio como son Manuela Agustina López Flores, Prieto de la Cal, Benítez Cubero, Peñajara, San Martín y Pedraza de Yeltes. La terna la completarían Octavio Chacón, Manuel Escribano y Pepe Moral.

En primer lugar salió un imponente y pesado toro del otro hierro de Samuel Flores. Bien lidiado por Chacón, fue bravo en el caballo donde tomó hasta 5 puyazos. Complicado y algo parado en banderillas. Ya en el último tercio acusó el peso y al verse sometido por un correcto Octavio Chacón, terminó por rajarse. Gran estocada por parte del matador a la que el toro resistió manteniéndose en pie durante varios segundos mientras era aplaudido por el público. Ambos recibieron sendas ovaciones.

Un toro algo raspa de Prieto de la Cal hizo de segundo. No destacó por su pelea en varas ni en banderillas. En el tercio de muleta ni toro ni torero pusieron de su parte y Escribano lo pasaportó tras una mala estocada que cayó baja.

El mejor tercio de varas llegaría con el bravo toro de Benítez Cubero y el picador Francisco Romero. Cuatro puyazos de menos a mas arrancándose desde lejos, bien picado por el del castoreño y empujando en el peto. Emoción que llegó a los tendidos. El tercio de banderillas también tuvo interés debido principalmente a la trasmisión del ejemplar y a su buena lidia. Pepe Moral lo había toreado bien de capa, pero en la muleta el toro se apagó para sorpresa y decepción del respetable. Moral sacó algún muletazo sin importancia y, tras darle muerte, dio una vuelta al ruedo por su cuenta muy protestada. Ovación al toro.

El sardo de Peñajara saltó al albero en cuarto lugar. En varas mostró genio y fijeza y derribó al caballo en el primer encuentro. En la muleta el toro se paró y Octavio Chacón se justificó pegándose un importante arrimón. Mató de otra gran estocada y dio la vuelta al ruedo merecida.

Ni toro ni picador en el quinto tercio de varas. El de San Martín pasó sin decir nada en la primera parte del festejo. El que sí dijo que era muy malo fue el picador, Francisco Macías, que se llevó la bronca de la tarde. El santacoloma se vino arriba en banderillas y en la muleta derrochó clase en la embestida tomándola con temple. Una embestida "mexicana" desaprovechada por Manuel Escribano que no supo entender a su oponente. Al San Martín se le caían las orejas y el sevillano tan solo logró algún pase suelto de valor, para dar una vuelta al ruedo tras habérsele marchado el animal que fue ovacionado sin cuajar una buena faena.

Enorme fue el de Pedraza de Yeltes, que acudió de largo y con fuerza y fijeza, aunque con la cara arriba al caballo montado y muy bien movido por Juan Antonio Carbonell. Ya en la muleta Moral no lo quiso ver por las dificultades que el astado ponía y de esta manera se cerró el festejo, a medias.

A medias nos quedamos los aficionados, que nos dabamos cita en alrededor un tercio de los tendidos. El toro que destacó en varas no lo hizo en la muleta, y el que destacó en la muleta no tuvo suerte con el matador que le correspondía. Los premios, muy protestados, fueron los siguientes: Toro más bravo de la corrida para Creyente de Manuela Agustina López Flores. Mejor lidiador para Pepe Moral. Mejor picador para Francisco Romero por su actuación ante el tercero de la tarde. Quizá el premio al toro y al lidiador debieron quedar desiertos.

NOTAS: Octavio Chacón 5, Manuel Escribano 3, Pepe Moral 3